Es una gran satisfacción ver que aquellos jóvenes que llegaran un día a su primera clase de budo taijutsu, llegan hoy a dar su primer examen de grado.
Ver esa entrega total para demostrar que merecen el grado al cual aplican, ver que si fallan una técnica, la suplen de inmediato sin titubear por otra que sea efectiva. Entendiendo el término «nagare» (fluidez) como si fuera un concepto propio dentro de ellos con el cual nacieron. Ver que ellos son conscientes que primero es evitar ser golpeados, y ya luego viene la técnica para desarmar o inutilizar.
Y sobre todo, que habiendo sido uno el uke del otro, acaban cada día como dos grandes hermanos que luchan por un mismo objetivo.
Mil gracias mis buyus, mis hermanos de arte!
Gambatte Kareem y Ángel!!!
Profe no se olvide de mi y mi hermano (chapo y daniel)
jamás los olvidaré, por su calidad de personas y de alumnos. Espero verlos pronto.